Viernes: Anubis vs. Suricatas & noche en Carlos E.

Y como no venia diciendo, pues ahora comienzo a escribir, este viernes 21 de septiembre de 2007 fue algo particular, como cada uno de los días que han quedado en el pasado para cada individuo. Personalmente comencé el día y la tarde en la jornada conmemorativa del centenario del nacimiento de Maurice Blanchot (¿a quién le importa? Pues a mi) para ver la ocultación del sol me tome una cerveza al frente de la U de A, en un antro donde nada de sol, mucho ruido y oscuridad, parto en el Circular Conatra pa’ Robledo, que tacos tan hijuepuchas, llego a la ciudadela robledo y las luces apagadas. Le pregunto al celador: ¿van a prender las luces? – pues si, lo que pasa es que se perdieron las llaves del cuarto donde se encienden las luces (respuesta del celador). Continuo y veo los Suricatos muy pocos por cierto y al fondo una mancha de personajes vestidos de azul, mancha muy uniforme. Los parceros de Anubis, listos para jugar, muy cumplidos y con la incertidumbre de la iluminación. Pasa un rato se encienden las luces, calentamiento rápido y ¡ULTIMATE! A lo que se vino carajo. El partido inicia muy bien para Suricatas con una muy amplia ventaja sobre Anubis, con José en la banca o mas bien de planillero; buena función por cierto, un aplauso. Diego lo acompañaba ¿Por qué no jugo? No llevo los guayos, así o más gue_on. Y Astrid por allí también de asistente y apoyando. Ah y algunos integrantes de Aire Jr. mirando la jugarreta. El primer tiempo por encima y se viene el segundo, que se podría titular: Tsunami sobre los Suricatos. Anubis comienza a remontar y los suricatos con un pobre juego, como sin ganas, con un letargo, malos cortes, todos pegados, discos al suelo; en este punto hay que aclarar que es virtud de Anubis más de un disco interceptado y en layout eso es importante. Suricatas al final gana, pero de que forma carajo.

Es importante pensar en lo que se viene. Yeso no es (¿no será?) el entrenador se los Suricatos, sigue jugando igual. Hay un capitán ¿hay un capitán? Personalmente no me gustan los rangos, todos somos personas. Pero algunos necesitan de tales conceptos. El rollo es se han entrenado muchas cosas que no se pueden olvidar con la renuncia o año sabático de una persona.

A los Anubis: me parece muy entretenido jugar con este equipo, estos muchachos juegan con una buena actitud ante el contrario, se da un respeto, un dialogo coherente y en busca de una salida que permite el buen fluir del juego. Afortunadamente existe el “pero”. Pero: no me gusta la actitud; y me permito ser muy metido y meterme a su rancho, actitud de discusión entre el equipo, estados de ánimos individuales que pueden y descontrolan un colectivo. La falta de serenidad con el disco y sin el disco. Con el disco mandando largos apresurados, forzados o a nadie. Pases cortos torpes y faltos de visión. Y sin el disco, no moviéndose bien y dejando caer los discos. Hay que acotar que estos es un malestar que se da en nuestros dos equipos.
Por fuera del partido muy buenas personas, eso creo y espero, y muchas gracias por el partido, ¡cojones y cabeza! Por el resto de su Ultimate. ATT: El esteta-vagabundo y mal jugador de ultimate: J.Camilo. jajaja.

Continuando con este viernes, no puede faltar la cerveza en la tienda fuera de la ciudadela y… se escucha un murmullo de: “hay concierto en el Carlos E. Fonso va tocar, vamos o que”. “No. Vamos pa’ el Colegio Mayor, mera fiesta y GRATIS”.

La mayoría adopta ir al Colegio Mayor, se va hacia allí en el carro de JuanMa, afortunadamente y oh sorpresa, cover de: $ 3000. Como todo buen Suricato si no es gratis ni ¡chim--! Se decide coger pa’ Carlos E. “mil pesos tres por la de atrás” se le dice hay un conductor de Robledo, de una y allí estábamos en Carlos E. sin concierto, con poca plata pero ganas de beber ¿si o no Diego? Se ven pasar personas de la comunidad Ultimate por aquellos lares, “un trago viene, un trago viene, un trago va” y se deja venir el show time.

Cuando giro a mirar veo a un tipo que rápidamente se quita su chaqueta y la tira a donde no le importa a nadie y va en busca del otro para golpearlo. El otro, chaqueta en mano, al parecer quiere mucho esa prenda pues nunca la soltó de su mano, se tira hacia atrás y se mueve circularmente, como los boxeadores en el rin de boxeo para no ser golpeado. El primero adopta una posición instintual e inconsciente, que a dado la TV el cine marcial fundamentalmente, de Karate Kid, si señores el hombre tambaleaba como el tipo de la película, pero no porque tuviese la pierna rota o algo así, era por los tragos que tenia, eso supongo, las manos al frente y sus muñecas caídas, algo muy gracioso. De esa manera buscaba al otro, mientras el otro, boleaba su chaqueta rápidamente en contra del otro, continuaba con el movimiento circular y además incorporaba una técnica marcial extraña y en forma de danza, comenzó a mover los pies como bailando flamenco, que momento mas divertido, solo faltaron las castañuelas. Entre patas voladoras, botellas voladoras, chaqueta girante y baile flamenco, la pela o el performance termino. Luego, aparece un señor que se le había perdido el celular hace un rato, alguien llama a su número de teléfono, lo encuentran, el señor muy agradecido ofrece trago o lo que quieran, el carro esta disponible. -“Yo voy pa’ Buenos Aires”. -“Yo lo llevo, yo vivo en el Poblado”. Pues que se le va hacer, mi instinto de permanencia y preservación, poco me importan, me monto al carro, un small wagom Subaru, (espero halláis tomado las placas) cierro la puerta, miro de donde se abre, por si hay que arrojarse del carro en movimiento. El señor muy buena gente, Restrepo era su apellido, eso creo, me deja en ayacucho, en el video variedades de ayacucho, al frente de la licorera que funciona toda la noche, diagonal a Kokoriko. Todo muy familiar ya, llego a mi morada, aun existo, puedo escribir.
Suere